Foster + Partners reveló su último proyecto comercial en el mundialmente famoso "cruce de Shibuya", en Tokio, Japón. Doblando el tamaño del centro comercial existente Shibuya Marui, este edificio de nueve pisos está pensado para convertirse en un nuevo y novedoso espacio para albergar tiendas de marcas sostenibles y ecológicas, adoptando los más altos estándares de sostenibilidad y los principios básicos de responsabilidad ambiental y de bienestar. El diseño de la estructura de madera y la selección de materiales reducirán significativamente la huella de carbono del edificio, creando simultáneamente una cálida experiencia para sus visitantes.
Marui tiene como objetivo crear una comunidad unida de marcas y personas que compartan los mismos valores ecológicos. El diseño del nuevo centro comercial se alinea con esta visión, maximizando el aprovechamiento de la luz diurna y el confort térmico pasivo, utilizando materiales naturales. Inspirado por las técnicas constructivas tradicionales japonesas, el edificio está compuesto por una estructura de madera que minimiza la huella de carbono del mismo, y marca, además, una distintiva presencia en una de las arterias principales de la ciudad.
La fachada oeste del edificio, que mira hacia Koen Dori Road, combina partes de estructura de madera expuesta con otras revestidas con listones. Así, se consigue un óptimo balance con respecto a las áreas vidriadas, reduciendo y regulando el asoleamiento. El núcleo de servicios está ubicado hacia el este, reduciendo aún más el calentamiento general del edificio, mientras los cerramientos de vidrio estriados generan una sensación de ligereza. Por otro lado, se crean conexiones visuales entre la azotea ajardinada propuesta y el recientemente inaugurado Miyashita Park hacia el este, y también hacia las áreas circundantes. La azotea verde incluye un café y un restaurante, y se planea la incorporación de una huerta urbana en un futuro.
En la planta baja, las entradas norte y sur llevan a los visitantes hacia la zona de circulación vertical, que se encuentra en el este, a través de pasarelas de bamboo acompañadas por muros verdes, que luego derivan en el centro comercial propiamente dicho. En el interior, el edificio presenta recintos comerciales de planta libre, con pisos y techos de madera, además de una estructura metálica que refuerza su resistencia sísmica. El centro comercial será alimentado por energía renovable, parte de la cual será generada por paneles fotovoltaicos propios.